Puedo empezar diciendo que soy bailarina y psicóloga y que durante mucho tiempo pensé que una anulaba a la otra. Hoy me animo a decir que una no existe sin la otra. Siempre están moviendo-se.
Me encanta observar y desmenuzar escenas, las artísticas y las psíquicas. Cuando escribo, algo de esa síntesis aparece. Pienso en la escritura como una performance de las palabras. Mi cuerpo es mi manera de conocer y el que me trajo hasta acá.